El ex-presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha recibido en este domingo (17) el Orden Nacional de la República de Benín, la más alta condecoración beninesa, en la ciudad de Cotonou. Lula viaja por cuatro países de África. Después de visitar a Guinea Ecuatorial y Ghana, el ex-presidente llegó hoy a Benín, donde fue recibido en el aeropuerto por el presidente Boni Yayi y aproximadamente 500 personas. Lula dejó Benín la tarde de este domingo (hora local) y viajó a Nigéria, última parada de su viaje.
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Después de la recepción y de asistir a presentaciones culturales, Lula tuvo una reunión con Boni Yayi. Los dos conversaron sobre el intercambio de experiencias en el combate contra el hambre, uno de los ejes de trabajo del Instituto Lula y también sobre las oportunidades que Benín tiene para las empresas brasileñas, especialmente en los sectores de energía y transporte.
Después, Lula participó de un almuerzo, en donde también estaban presentes, además del presidente, ministros, parlamentares y directores de instituciones del país africano. La entrega del premio fue realizada durante el almuerzo y Lula hizo su discurso de agradecimiento, en el cual celebró la evolución de las relaciones entre los dos países desde el primer viaje que él hizo a Benín, en 2006.
Boni Yayi es el ex-presidente de la Unión Africana y se ha encontrado otras veces con el ex-presidente Lula. La última de ellas ha sido durante la Rio +20, en junio del año pasado.
Vea abajo el discurso de agradecimiento que Lula ha leído en Benín (no contiene improvisaciones):
Su Excelencia, Presidente de la República de Benín;
Excelentísimos Directores de las Instituciones de la República de Benín;
Señoras y señores, Ministros y miembros del Gobierno de Benín;
Señora Grande Canciller de la Orden Nacional de la República de Benín;
Señoras y Señores Diputados, miembros de misiones diplomáticas y consulares y representantes de instituciones internacionales acreditadas en Benín;
Distinguidos invitados;
Señoras y señores;
En nombre de la delegación que me acompaña, me gustaría expresar antes de todo mi más profunda gratitud al pueblo de Benín, al Presidente, mi amigo Thomas Boni Yayi, a las diferentes autoridades y a todos ustedes aquí presentes, por esa prueba de amistad y de estima en relación a mi, que se manifiesta por el calor de las bienvenidas que ya he recibido desde los primeros momentos de mi estadía aquí en Benín.
Cuando tuve el privilegio de visitar Benín, en febrero de 2006, las relaciones entre nuestros países aún estaban en su infancia, y nuestros pueblos sentían la necesidad de volver a aproximarse. En esa ocasión, yo tuve la oportunidad de encontrar representantes de la comunidad afro-brasileña en Cotonou y Uidá, y eses encuentros me marcaron profundamente. Ahora, puedo decir que me impacta el mismo sentimiento de reencuentro y de retorno a los orígenes que sentí en el primer contacto con el pueblo beninés.
Con gran satisfacción, puedo constatar hoy, siete años después, la evolución de las relaciones del gobierno y de la cooperación entre nuestros dos países, así como la reaproximación de nuestros pueblos. Me quedo muy satisfecho al saber que nuestros respectivos gobiernos hicieron considerables progresos en todos los sectores en la cooperación para el desarrollo. Los proyectos de cooperación en sectores de educación, salud, agricultura, deporte y patrimonio cultural hicieron progresos admirables, que también se notan en el campo de la iniciativa privada, especialmente en energía, construcción, infraestructura y transporte. Ciertamente, esos esfuerzos deberán tener un seguimiento y Brasil, teniendo en cuenta su compromiso histórico con África, que constantemente evoco, tiene el deber moral de acompañar a Benín en su camino de desarrollo en búsqueda del bienestar para su población.
Sr. Presidente Boni Yayi, estimado amigo;
Aprovecho la oportunidad para expresar mi más alto reconocimiento por su inestimable actuación como jefe de la Unión Africana. Su voz de renovación y de esperanza hizo eco más allá de este continente, transmitiendo el sentimiento de optimismo que nos mueve en relación a África. Sus esfuerzos de alcanzar el diálogo rápido antes de llegar el conflicto, de favorecer el entendimiento entre hermanos y de promover la paz en donde ella ha escapado de nuestras manos, ha tornado memorable el renacimiento del panafricanismo y del entendimiento mutuo que tanto precisamos en el mundo.
Señor Presidente, Señora Grande Canciller,
Es con gran orgullo que recibo la condecoración de la Orden Nacional del PUEBLO de Benín. Esta valiosa condecoración va a ser un símbolo y un incentivo para continuar mi jornada para la construcción del desarrollo y de la inserción de las poblaciones menos favorecidas a un mundo más justo y solidario.
Sr. Presidente, yo sé que su gobierno y su pueblo tienen profundo interés en la promoción y en la defensa de valores de buena gobernanza, justicia y libertad, requisitos fundamentales para el desarrollo económico y, especialmente, para la mejoría de las condiciones de vida de las poblaciones vulnerables. Quiero enfatizar que estoy visitando Benín en nombre del Instituto que lleva mi nombre, cuyos principales objetivos son el desarrollo de poblaciones vulnerables, incluyendo mujeres, niños, jóvenes y todas las personas en situaciones precarias. En este sentido, buscamos desarrollar asociaciones con la sociedad civil y trabajar en conjunto para la promoción de los valores democráticos y del progreso social. Estoy profundamente agradecido con su excelencia por recibirnos tan bien hoy en nuestra misión.
He visitado muchos países africanos y quiero visitar aún muchos más al frente del Instituto Lula con mis estimados colaboradores que me acompañan. Mi experiencia muestra que la construcción de naciones prósperas está basada en el despertar de su pueblo y de sus líderes. Por esa razón, Benín ocupa un lugar especial en nuestros proyectos. Yo quiero expresar mi fe en un futuro promisor para este país y para todo el continente africano.
Reitero mi agradecimiento a los dirigentes de las prestigiosas empresas brasileñas que están aquí presentes.
Señor Presidente, Señoras y Señores,
Permítanme concluir, reiterando mis sinceros agradecimientos por la fraterna acogida que he recibido y por el honor de haberme conferido esta condecoración.
Muchas gracias.
